Puré de calabaza

Un puré de calabaza es una apuesta segura cuando se trata de agradar al paladar más exigente, y ya sabemos que los niños son habitualmente quisquillosos con los purés y cremas de verduras, aunque hay dos que no suelen fallar, el puré de calabacín y el puré de calabaza. El sabor suave de estos purés casi siempre es de su agrado, así que no desaprovechéis la ocasión de ofrecérselos cuando se encuentran en temporada.

La calabaza es una hortaliza que vais a poder encontrar casi todo el año dependiendo de si se trata de la variedad de verano o la calabaza de invierno.

¿Qué tenéis que tener en cuenta a la hora de elegir una calabaza?… En el caso de la calabaza de verano es mejor elegirla de un tamaño mediano, ya que las más grandes suelen tener la carne más amarga. Elegidla con la piel brillante y suave, y con la piel no excesivamente dura, y huid de aquellas que pesan mucho y tienen un tacto áspero con la piel apagada. La calabaza de invierno aguanta más tiempo ya que tienen menor proporción de agua, pero el consejo sería el mismo, piel suave y firme.

La calabaza es una estupenda fuente de fibra con muy pocas calorías, y tienen una cantidad muy apreciable de betacarotenos y vitamina C, E y grupo B. Es asimismo rica en potasio. ¿Qué aporta todo esto a nuestra salud? Ayuda a cuidar la vista gracias a los betacarotenos, mejora el tránsito intestinal, es diúretica y depurativa, y previene enfermedades degenerativas, cardiovasculares y el cáncer. Es muy recomendable también para aquellas personas propensas a sufrir enfermedades respiratorias y aquellas con piel seca, y naturalmente es un alimento muy recomendable para niños, embarazadas y mujeres en periodo de lactancia.

Con todos estos beneficios, ¿quién se resiste a comer un delicioso plato de puré de calabaza?…

Puré de calabaza

Ingredientes:

• 1 kilo de calabaza.
• 100 gramos de margarina.
• 1 cebolleta fresca.
• ½ litro de agua.
• 4 cucharadas de harina.
• ¼ litro de leche.
• 1 yema de huevo.
• Sal.
• Una pizca de pimienta blanca.

Cómo se elabora el puré de calabaza

Pelamos y cortamos la calabaza en trozos. Derretimos la mitad de la margarina en una cazuela y freímos en ella la calabaza y la cebolla cortada en tiras, durante unos 10 minutos. Añadimos el agua y dejamos que hierva hasta que la calabaza esté tierna. Dejamos enfriar ligeramente y pasamos por un pasapurés con un poco de leche. Derretimos el resto de la margarina y mezclamos con la harina como si fuese para una salsa bechamel.

Cocemos durante 1 minuto y añadimos la calabaza triturada. Añadimos el resto de la leche poco a poco y dejamos hervir a fuego bajo durante 10 minutos. Salpimentamos la crema de calabaza.

Justo antes de servir, añadimos la yema del huevo y removemos enérgicamente para refinar el sabor de la crema y colocamos la cazuela en el fuego sin dejar que vuelva a hervir para evitar que cuaje la yema.

Imagen: Le living and co