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La crema de mejillones es uno de esos platos que nos encanta preparar a partir de septiembre, justo cuando los mejillones están en su mejor momento. Su sabor es más intenso, la carne está más jugosa y el precio suele ser imbatible, así que es el momento ideal para incluirlos en nuestro menú.
Lo que más nos gusta de esta receta es que es muy fácil de hacer y queda con una presentación de restaurante. Una crema de mejillones frescos, bien triturada y con ese punto de sabor a mar, es perfecta tanto para un día de diario como para sorprender a los invitados en una ocasión especial.
Receta de crema de mejillones
Ingredientes
- 1 kg de mejillones frescos
- 2 puerros
- 4 zanahorias
- 1 cucharada de harina
- 1 vaso de tomate frito (200 ml aprox.)
- 400 ml del caldo de cocer los mejillones (o caldo de pescado)
- 100 ml de nata líquida para cocinar (mínimo 18 % MG)
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
- Pimienta negra molida al gusto
- Cebollino fresco para decorar
- Un chorrito de aceite de oliva virgen extra para servir
Cómo hacer crema de mejillones
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Limpiamos 1 kg de mejillones frescos retirando barbas y conchas rotas.
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Los ponemos en una olla con un dedo de agua, tapamos y cocemos a fuego fuerte 4-5 minutos, hasta que se abran.
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Colamos el caldo de cocción y lo reservamos. Retiramos la carne de las conchas, reservando unos 8-10 mejillones enteros para decorar.
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En una cazuela, calentamos 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y rehogamos 2 puerros y 4 zanahorias picados hasta que empiecen a dorarse. Añadimos 1 cucharada de harina, removemos y cocinamos 1 minuto.
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Agregamos 1 vaso de tomate frito y el caldo de los mejillones hasta completar 400 ml, mezclamos y llevamos a ebullición. Incorporamos la carne de los mejillones, salpimentamos al gusto y dejamos cocinar a fuego medio durante 10 minutos.
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Trituramos con batidora hasta obtener una crema fina. Añadimos 100 ml de nata líquida para cocinar, mezclamos bien y calentamos un par de minutos más sin que llegue a hervir para que no se corte. Si queremos una textura más sedosa, pasamos por un colador.
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Repartimos la crema en cuencos individuales, decoramos con los mejillones enteros, cebollino fresco picado y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
Consejos para que la crema de mejillones quede perfecta
Antes de lanzarte a preparar la receta, apunta estos consejos:
- Usa mejillones frescos de temporada. De septiembre a abril es la época en que están más carnosos y sabrosos.
- No tires el caldo de cocción. Es el secreto del sabor de la crema de mejillones, puedes congelar el sobrante para otras recetas.
- Ajusta la textura a tu gusto. Añade más caldo si te gusta más ligera o deja reducir unos minutos si prefieres una crema más densa.
- Usa nata de cocinar, no de montar, para que tenga la textura adecuada y no quede demasiado grasa.
- Incorpora la nata al final, con el fuego muy bajo, para evitar que se corte o se separe la grasa.
- Prueba antes de servir. Con la nata puede necesitar un punto extra de sal para potenciar el sabor a mar.
- Decora justo antes de servir. Unos mejillones enteros y cebollino fresco le dan un toque profesional
Resúmen fácil de la crema de mejillones
- Cocer 1 kg de mejillones, reservar 400 ml de caldo y la carne.
- Rehogar 2 puerros y 4 zanahorias en 2 cdas. de aceite, añadir 1 cda. de harina, 200 ml de tomate frito y el caldo.
- Incorporar 400 g de mejillones, sal y pimienta; cocinar 10 min.
- Triturar, añadir 100 ml de nata, calentar sin hervir.
- Servir con mejillones enteros, cebollino y un hilo de aceite
