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La mermelada de limón es menos común que otras mermeladas tradicionales como la de fresa, la mermelada de melocotón o albaricoque, pero su sabor ácido y fresco la convierte en una opción muy especial. Prepararla en casa es una forma sencilla de aprovechar limones frescos y conseguir un resultado natural, perfecto para untar en tostadas o añadir a yogures y postres.
Además, hacer mermelada casera te permite controlar el dulzor y probar combinaciones nuevas, como mezclarla con naranjas o añadir un toque de jengibre. Igual que pasa con la mermelada de ciruela o de higos, el encanto está en abrir un tarro que has hecho tú mismo y disfrutar de su sabor auténtico.
Receta de limón casera
Ingredientes
- 1 kg de limones (aproximadamente 10-12 limones)
- 600 g de azúcar
- 1 litro de agua
- Jugo de 1 limón adicional (opcional)
- 1 trozo de jengibre fresco (unos 5 cm), pelado y rallado (opcional)
- 2 ramas de canela (opcional)
- Pectina (opcional, si prefieres una textura más firme)
Cómo hacer mermelada de limón con jengibre y canela
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Lava bien los limones con agua tibia para eliminar cualquier residuo.
Pela los limones, asegurándote de eliminar la mayor cantidad de parte blanca posible, ya que puede amargar la mermelada. Corta la pulpa de los limones en trozos pequeños, quitando las semillas
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Coloca los trozos de limón en una cacerola grande. Añade el litro de agua y lleva a ebullición a fuego medio-alto.
Deja hervir durante 30 minutos, removiendo de vez en cuando para que no se pegue.
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Añade el jengibre rallado y las ramas de canela a la cacerola con los limones. Remueve bien para que los sabores se integren.
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Después de los 30 minutos, añade los 600 g de azúcar a la cacerola. Remueve bien hasta que el azúcar se disuelva completamente.
Si decides usar pectina, este es el momento de añadirla siguiendo las instrucciones del paquete.
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Reduce el fuego a medio-bajo y deja cocinar la mezcla durante 1 hora, removiendo ocasionalmente.
La mermelada estará lista cuando haya espesado y tenga una consistencia gelatinosa. Puedes probarla colocando una pequeña cantidad en un plato frío; si se arruga al empujarla con el dedo, está lista.
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Esteriliza los frascos de vidrio hirviéndolos en agua durante al menos 10 minutos. Llena los frascos con la mermelada caliente, dejando un pequeño espacio en la parte superior.
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Cierra los frascos herméticamente y colócalos boca abajo durante 10 minutos para crear un vacío.
Preguntas frecuentes
¿Qué limones son mejores para hacer mermelada?
Lo ideal es usar limones frescos, firmes y con piel fina, preferiblemente ecológicos. Así tendrás más jugo y menos parte blanca, que puede amargar.
¿Cómo saber si la mermelada está lista?
Haz la prueba del plato frío: pon un plato en el congelador antes de empezar. Cuando creas que la mermelada está lista, coloca un poco en el plato, deja enfriar y empuja con el dedo. Si se arruga, está en su punto.
¿Puedo reducir el azúcar?
Sí, pero recuerda que el azúcar ayuda a conservar la mermelada. Si la reduces, consúmela antes y guarda el frasco en la nevera una vez abierto. Puedes añadir jugo de limón extra para equilibrar el sabor.
¿Cuánto dura la mermelada de limón casera?
Si se envasan en frascos esterilizados y se guardan en un lugar fresco y oscuro, duran hasta 1 año. Una vez abiertos, hay que refrigerarlos y consumir en un mes.
¿Es necesario usar pectina?
No, los limones tienen pectina natural. Pero si quieres una textura más firme, puedes añadir un poco siguiendo las instrucciones del envase.
Resúmen fácil de la receta de mermelada de limón
- Pela 1 kg de limones quitando lo blanco y las semillas, corta en trozos y pon en cacerola con 1 litro de agua. Hierve 30 min.
- Añade 5 cm de jengibre rallado, 2 ramas de canela y 600 g de azúcar. Cocina a fuego medio-bajo 1 h hasta que espese.
- Llena frascos esterilizados, ciérralos y colócalos boca abajo 10 min para hacer vacío.
Variantes de la mermelada de limón
Mermelada de limón y naranja
El resultado es una mermelada más suave y menos ácida, perfecta para quienes prefieren un toque cítrico equilibrado.
Ingredientes
- 500 g de limones pelados y sin semillas
- 500 g de naranjas peladas y sin semillas
- 1 litro de agua
- 600 g de azúcar
Pasos
- Pela y corta en trozos los 500 g de limones y los 500 g de naranjas, quitando semillas.
- Pon la fruta en una cacerola grande con 1 litro de agua y lleva a ebullición. Cocina 30 minutos a fuego medio.
- Añade los 600 g de azúcar, remueve hasta que se disuelva y cocina a fuego medio-bajo 45-60 minutos hasta que espese.
- Esteriliza frascos, rellénalos con la mermelada caliente, ciérralos y colócalos boca abajo 10 minutos para hacer vacío.
Mermelada de limón con miel y jengibre
Ingredientes
- 1 kg de limones pelados y sin semillas
- 300 g de miel
- 300 g de azúcar
- 1 litro de agua
- 5 cm de jengibre fresco rallado
Pasos
- Pela y trocea el kilo de limones, retirando semillas, y ponlos en cacerola con 1 litro de agua. Lleva a ebullición y hierve 30 minutos.
- Agrega el jengibre rallado, los 300 g de miel y los 300 g de azúcar. Remueve bien hasta que se integren.
- Cocina a fuego medio-bajo 1 hora, removiendo de vez en cuando, hasta que espese.
- Esteriliza frascos, llénalos con la mermelada caliente, ciérralos y colócalos boca abajo 10 minutos.
Si te animas a hacer mermelada de limón en casa, estas dos variantes —con naranja o con miel y jengibre— son una forma estupenda de darle un toque distinto. Lo bueno de las mermeladas caseras es que puedes experimentar con sabores y ajustar el dulzor a tu gusto.
¿Quieres probar otras recetas de mermeladas de cítricos? Prueba la mermelada de naranja y también la mermelada de naranja amarga de Sevilla. Si prefieres una versión más dulce te gustará la mermelada de mandarina.
