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Las patatas Hasselback son un bocado de lo más rico que he probado últimamente, aunque ya las preparé hace algún tiempo, no recordaba que me gustaran tanto. Lo mejor es que a los niños también les han gustado muchísimo.
Las patatas Hasselback vienen de Suecia, concretamente del restaurante Hasselbacken en Estocolmo, donde se hicieron por primera vez en los años 50. Lo que las hace especiales son esos cortes en forma de acordeón que no llegan a separar la patata, y que al hornearse se abren un poco, dejando que el aceite, la sal o el queso se metan bien dentro. El resultado: crujientes por fuera, tiernas por dentro y con mucho sabor. Y si te preocupa pasarte con el cuchillo, no te pierdas el truco del paso a paso para que no se te rompan.
Además, si tienes freidora de aire, puedes hacer las patatas hasselback en freidora de aire en la mitad de tiempo y sin perder nada de ese exterior crujiente que tanto nos gusta. Son perfectas para acompañar carne, pescado, o incluso servir como plato principal con un poco de queso fundido por encima o unas tiras de bacon
Me gusta presentarlas con un poquito de crema agria por encima, unos trocitos de bacon y unos trocitos de cebolleta, un bocado realmente apetitoso.
Receta de Patatas Hasselback
Ingredientes
- 10 patatas pequeñas
- Queso Cheddar curado
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal gorda
- Bacon
- Cebolletas
Crema agria:
- 250 g nata 35% mg fría
- 3 cucharaditas zumo de limón
- 2 cucharaditas vinagre blanco
- Un poquito de sal
Cómo hacer patatas Hasselback al horno
- Cortamos el queso por la mitad y la mitad en lonchas finitas.
- Nos ayudamos de una cuchara para cortar las patatas, sin miedo cortamos hasta el final.
- Rellenamos cada hueco de la patata con las lonchas de queso, añadimos por encima un poquito de aceite de oliva virgen extra y sal
- Ponemos en el horno a 180º durante 30 minutos aproximadamente, el tiempo es siempre orientativo.
- Retiramos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Patatas hasselback en freidora de aire
Ingredientes
10 patatas pequeñas; 100 g de queso Cheddar curado rallado; 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra; sal gorda al gusto; 4 lonchas de bacon; 2 cebolletas
Preparación
Lavamos bien las patatas sin pelarlas y les hacemos cortes finos sin llegar a la base. Las pincelamos con aceite y sal gorda. Las colocamos en la cesta de la freidora de aire y cocinamos a 180 °C durante unos 25-30 minutos, revisando a mitad de cocción. Mientras tanto, freímos el bacon hasta que esté crujiente y lo picamos. Cuando las patatas estén tiernas, les ponemos el queso por encima y las dejamos 3-5 minutos más para que se funda. Terminamos con una cucharada de crema agria, el bacon crujiente y la cebolleta en rodajitas finas
Cómo acompañar las patatas Hasselback
Acompañamos las patatas Hasselback con crema agria.
- Añadimos nata líquida muy fría en un bol, vertemos 3 cucharaditas de zumo de limón y con unas varillas comenzamos a batir, veremos como al pasar unos minutos la nata va cogiendo cuerpo.
- Una vez que empiece a coger más consistencia, añadimos las cucharaditas de vinagre blanco y mezclamos.
- Añadimos la sal y seguimos batiendo hasta que espese, tardará unos minutos.
- Si veis que queda muy espesa, podéis aligerar la crema agria añadiendo un poquito de leche.
- Reservamos.
En nuestro caso una vez pierdan parte del calor acompañamos las patatas Hasselback con la crema agria, unos trocitos de bacon fritos y unos trocitos de cebolleta fresca.
Consejos para preparar patatas hasselback perfectas
Aunque la receta es sencilla, hay varios trucos que pueden marcar la diferencia entre unas patatas normales y unas que desaparecen del plato en minutos. Aquí te dejamos algunas ideas para que te salgan siempre bien:
- El truco de las cucharas: Para evitar cortar del todo las patatas, ponlas entre dos cucharas de madera o palillos chinos. Así, al hacer los cortes, el cuchillo se detiene justo en el borde y no atraviesas la base.
- Escoge bien las patatas: Lo ideal son patatas pequeñas o medianas, del mismo tamaño, para que se cocinen por igual. Las variedades más firmes, como la monalisa o la baby patata, aguantan muy bien la forma.
- No escatimes con el aceite: Si quieres que se queden crujientes por fuera, es importante pincelarlas bien con aceite y repetirlo a mitad de cocción si ves que se secan.
- Aprovecha los cortes para el sabor: Introduce láminas finas de ajo, bacon o incluso unas hojitas de romero entre los cortes antes de hornear. Le da un toque espectacular.
- Tiempos orientativos: En horno suelen tardar entre 40 y 50 minutos, según el tamaño. En freidora de aire, unos 25-30 minutos suelen ser suficientes, aunque conviene vigilarlas los últimos minutos para que no se pasen
Preguntas frecuentes sobre las patatas hasselback
¿Cuánto tiempo necesitan las patatas hasselback en freidora de aire?
Depende del tamaño, pero en general con patatas pequeñas o medianas, unos 25-30 minutos a 180 °C son suficientes. Si las patatas son más grandes, puedes alargarlo a 35 minutos. Es buena idea pinchar con un palillo a partir del minuto 25 para comprobar que están tiernas por dentro.
¿Se pueden preparar con antelación?
Sí. Puedes hacer los cortes y dejarlas en un bol con agua para que no se oxiden, incluso unas horas antes. También puedes hornearlas a falta de los últimos minutos, guardarlas en la nevera, y justo antes de servir añadir el queso y gratinar. Así quedan como recién hechas.
¿Qué queso puedo usar si no tengo Cheddar?
Cualquier queso que funda bien sirve: mozzarella, gouda, emmental o una mezcla de quesos rallados tipo “4 quesos”. También puedes combinar uno que funda con otro más fuerte como un poco de azul si os gusta en casa.
¿Y si quiero hacer patatas hasselback veganas?
Puedes usar aceite de oliva aromatizado con ajo o hierbas, y sustituir el queso por una versión vegetal tipo “mozzarella vegana” o levadura nutricional. En lugar de bacon, puedes poner cebolla crujiente o champiñones salteados.
¿Qué puedo servir con las patatas hasselback?
Van genial como guarnición de carnes, pescado o hamburguesas caseras. Pero también puedes convertirlas en plato principal si les añades topping: queso, crema agria, guacamole o incluso huevo escalfado. Son muy versátiles.
En casa las patatas hasselback nos han salvado más de una cena. Son fáciles, quedan resultonas y encima puedes tunearlas con lo que tengas por la nevera. Al horno o en freidora de aire, siempre terminan desapareciendo del plato, sobre todo cuando les pones queso y bacon por encima… No digas que no te lo advertimos.
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