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Las Gachas dulces son un postre tradicional de la cocina andaluza, en algunas zonas se les conoce como Poleá o Talvinas. Un plato humilde que quitó mucha hambre (cuando no había leche se hacían con agua). Hoy día se disfrutan como algo especial.
En Cordoba y Jaén, suelen comerse como postre el día 1 de noviembre, Día de Todos los Santos, un día de fiesta en el que se suele comer con familiares y amigos. Como curiosidad, si sobraban gachas dulces, en algunos municipios se ponían en las cerraduras para evitar la entrada de malos espíritus la noche de los difuntos, del 1 al 2 de noviembre.
Hay un refrán que dice que: “Merendando gachas con tostones al día siguiente aparece la belleza por todos los rincones”, así que ya sabéis…
Receta de Gachas dulces andaluzas o Poleá
Ingredientes
- 1 litro de leche
- 1 rama de canela
- Piel de limón
- 225 ml de aceite de oliva
- 100 g de harina de trigo
- 1 cucharadita de sal
- 80 g de azúcar blanquilla
- 2 cucharadas de anís dulce
- 3 rebanadas de pan
- Canela molida
Cómo hacer Gachas dulces o Poleá tradicionales
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Cortamos el pan en trozos pequeños. En una sartén ponemos 225 ml de aceite de oliva y freímos el pan hasta que esté dorado, el aceite debe estar a temperatura media. Sacamos y reservamos en un plato con papel de cocina para absorber el exceso de aceite.
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En un cazo ponemos 1 litro de leche junto con la piel de limón y la rama de canela y llevamos a ebullición. Una vez comience a hervir, apagamos el fuego.
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Colamos el aceite de haber frito el pan y ponemos en una cazuela. Incorporamos los 100 gramos de harina con la cucharadita de sal mezclados.
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Freímos removiendo constantemente con unas varillas hasta que esté bien cocinada y tenga un color dorado.
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Añadimos la leche infusionada que habíamos reservado, lo haremos poco a poco mientras continuamos mezclando con las varillas todo el rato, hasta obtener una crema espesa, ligera, sin ningún grumo. Hay que tener en cuenta que al enfriarse espesarán aún más.
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Añadimos los 80 gramos de azúcar y las dos cucharadas de anís dulce, y mezclamos de nuevo hasta que esté todo integrado.
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Ponemos picatostes en el fondo de los cuencos o de la fuente, y vertemos las gachas calientes encima con un cucharón.
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Espolvoreamos con canela molida o miel de caña y servimos.
Cómo acompañar las gachas dulces de Jaén
Estas gachas dulces están tan deliciosas que se comen tal cuál, hay a quién les gustan recién hechas, aún templadas y quién las prefiere frías, de una forma u otra seguro que repetís. Lo que no puede faltar es la canela molida o la miel de caña, que le aportan el toque final.
Consejos para hacer poleá o gachas dulces tradicionales
Si quieres que tu postre sea recordado por tus comensales como unas de las mejores gachas dulces que hayan probado nunca sigue estos consejos:
- Utiliza pan asentado, de uno o dos días, para hacer los picatostes, así soltarán menos migas y quedarán mejor.
- Puedes sustituir la harina de trigo por harina fina de maíz o maicena, y para los picatostes pan sin gluten y así tendrás unas gachas dulces aptas para celiacos.
- Si notas que las gachas tienen grumos, pásale la batidora de mano, y en unos segundos tendrás una textura homogénea, prometemos guardarte el secreto.
- Puedes prepararlas poniendo mitad de leche y mitad de agua.
Si te has quedado con ganas de más ideas para celebrar el Día de Todos los Santos, aquí van algunas ideas que seguro te van a tentar, como los buñuelos de viento, los Huesos de Santo o los Huesos de San Expedito:
