Cómo hacer rebujito con hierbabuena (la bebida más típica de la feria de Sevilla)
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No hay Feria de Abril sin rebujito, y podríamos decir que no hay feria andaluza sin esta famosa bebida… y es que un rebujito con hierbabuena refresca el cuerpo y el espíritu, y nos pone enseguida en sintonía con el alma de la feria ¿a que sí?
A la par de la sangría, un buen vaso de rebujito es refrescante y sienta de maravillas, pero claro que es una bebida alcohólica por lo que hay que tomarla con precaución. Y no tenemos que esperar a ir de feria o de romería para poder degustar un buen vaso de rebujito, porque vamos a ver que se prepara en un momento y necesitamos solo 4 ingredientes bien sencillos.
Pero antes de ir a la receta, os vamos a contar un poco más sobre esta bebida, sobre todo para todos los amigos que nos leen desde otros países y tal vez no sepan de qué se trata, y también para los españoles porque la historia del origen del rebujito tiene su encanto.
¿Qué es el rebujito?
El rebujito es una bebida alcohólica típica de Andalucía, que se prepara mezclando vino manzanilla, refresco de lima-limón, hierbabuena y hielo. Es muy popular y la bebida más típica de la Feria de Abril y otras ferias andaluzas, y también de muchas romerías.
Es difícil saber cuál es exactamente el origen de esta bebida. La teoría más acreditada afirma que podría haberse inspirado en una bebida similar inglesa, el Sherry Cobbler. En época victoriana era una bebida de moda en círculos distinguidos, y se preparaba con vino de Jerez (Sherry en inglés), soda, zumo de limón y hielo. Pero hay otra historia curiosa y más andaluza que cuenta que en los años ’80 un grupo de amigos farmacéuticos de Granada inventó el rebujito mezclando el vino y el refresco que tenían a mano, en el intento de tomar algo que les aliviara del calor y el cansancio que traían.
Sea cual sea el origen, recién en 1985 se tiene el primer registro de la preparación de esta bebida en una fiesta andaluza, las fiestas del Corpus de Granada de ese año. Y sin duda desde los años ’90 es la bebida más popular y típica de ferias y romerías.
Receta de rebujito clásico
Ingredientes (6 vasos)
- 300 ml de vino manzanilla (DO Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda, como este o este)
- 600 ml de refresco de lima-limón
- unas ramitas de hierbabuena
- hielo
Cómo hacer rebujito
Vamos a preparar nuestra bebida en una jarra para que los sabores se integren bien, y luego servirla en los vasos. Os aconsejamos tener la jarra y los vasos en la nevera para que también estén fríos.
La preparación no tiene más truco que mezclar el vino y el refresco y poner bastante hielo, con unas hojitas de hierbabuena. Luego podemos servir en los vasos, dejando que además de la bebida vaya un poco de hielo y decoramos con una ramita de hierbabuena.
Los secretos del rebujito perfecto
El vino manzanilla
El vino Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda es un vino seco que se elabora con la uva palomino, la misma que se usa para el Jerez. El rebujito de la Feria de Abril se elabora así, con vino manzanilla, pero en otras zonas se utiliza también vino Fino o el Montilla Moriles, otros vinos andaluces con características similares. En cuanto a las proporciones, lo usual es es 1/3 de vino y 2/3 de refresco, pero nada nos impide variarlas a nuestro gusto, sobre todo si queremos beber sin temor a beber de más podemos poner menos vino y más refresco.
Fundamental que esté bien frío.
El refresco
Cualquier refresco de lima-limón, estilo Sprite o 7 Up, van bien para prepararlo. Claro está, tiene que estar muy frío, igual que el vino.
La hierbabuena
Solo tenemos que lavarla bien y cortar las hojitas para ponerlas dentro de nuestra bebida. La cantidad va siempre al gusto, pero os aconsejamos no exagerar porque como sabéis su sabor es intenso y no queremos que cubra completamente los sabores del vino y el refresco.
El hielo
Abundante para mantener fría la bebida, que vayan dos o tres cubitos por vaso.
Con qué acompañar el rebujito
El rebujito es ideal para el aperitivo, sobre todo en primavera y verano, porque es muy refrescante y suave. Perfecto para acompañar aperitivos de pescado y marisco, como por ejemplo unas gambas a la gabardina, una ensaladilla de gambas o unos calamares fritos a la andaluza, pero también con unas sencillas aceitunas o patatas fritas.
Si te ha gustado el rebujito, seguro que te interesarán las recetas de la sangría, o cócteles frescos como el margarita, la caipiriña, el daiquiri, el gin tonic o el mojito.
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